¡Hola a tod@s!
La semana pasada os hablé de lo mucho que me gustaba, cuando tan solo era una jovencita, la poesía de Pablo Neruda. Hoy me gustaría seguir mostrando el contenido de ese archivador en el que guardo tantos recuerdos de mis primeros escritos. Sobre todo, me llamó la atención mi interés en saber lo que era un "haiku"; e incluso creo que intenté escribir alguno, pero sin ningún éxito.
Según la RAE: "un haiku o haikú, es una composición poética de origen japonés que consta de tres versos de cinco, siete y cinco sílabas respectivamente". Además, si indagamos por Internet, desde un punto de vista formal, el haiku se divide en dos partes: una da la condición general y la ubicación temporal y espacial del poema (otoño o primavera, un ruiseñor); y la otra debe contener un elemento activo. Es decir, una parte es descriptiva y casi enunciativa; la otra, inesperada. La percepción poética surge del choque entre ambas.
A "Matsuo Basho", el que escribió el primer haiku que habéis podido leer entre los ejemplos anteriores, es la persona a quien se considera como "el padre de este género".
¿Qué os parecen? ¿Conocíais su existencia? Parece fácil, pero creo que tiene su complicación. De hecho, la poesía, en general, creo que es de lo más difícil de escribir; pero diría que un haiku, en concreto, aún más. Hay que tener la mente muy despejada y pensar en las tres reglas a la vez para poder escribir un haiku "real". Es cierto que luego siempre encontramos excepciones, y si os paráis a contar las diferentes sílabas que componen cada uno de los versos de los distintos haikus que os he mostrado, prácticamente ninguno cumple con la métrica que comentaba al principio (cinco-siete-cinco) y, a pesar de ello, se siguen denominando como tal. Esto solo nos muestra que el tema de las sílabas es algo aproximado y la regla es general, pero no estricta.
¿Y vosotros? ¿Os animáis a escribir uno?
¡Hasta el lunes que viene! Gracias por estar ahí.
¡Feliz semana!
No hay comentarios:
Publicar un comentario