¡Hola a tod@s!
Como sabéis, el próximo 23 de abril es el Día del Libro; una fecha clave que se escogió porque guardaba relación con el ámbito literario, ya que fue el día en el que falleció Miguel de Cervantes, William Shakespeare e Inca Garcilaso de la Vega, en el año 1616. Nunca se me ha dado bien la historia de la literatura en sí, pero este tipo de datos me gusta recordarlos...
Desde hace tiempo, el Día del Libro es una fecha especial para mí, aunque es verdad que nunca me ha dado por celebrarla; pero siento como una ilusión innata que no sé cómo explicar. Me imagino las calles de todas las ciudades llenas de puestos en los que venden multitud de libros y, cómo no, pienso en que algún día puedan estar ahí alguno de los míos; en concreto la novela que tengo entre manos. Además, imagino a numerosos autores firmando sus obras, inventando dedicatorias para cada ejemplar -aunque hay algunos que siempre utilizan la misma, la verdad es que creo que el ir improvisando es lo más complicado, aunque no por eso deja de ser maravilloso-. Es bonito soñar, tener ilusiones y, sobre todo, mucha, mucha imaginación. Por eso, para un escritor, o futuro escritor, lo importante es seguir creando, aunque esté lejos de dar por terminada esa creación. ¿Quién sabe? Quizás tenga razón quien dice que los libros son como la cocina, y para eso hacen esta comparación: los mejores guisos son los que se hacen a fuego lento, tal vez pase lo mismo con las novelas que tardan en ver la luz...
Pero, volviendo a la fecha del próximo sábado, me gustaría saber qué es lo que significa este día para vosotros. Creo que para cada persona, los libros tienen un significado diferente. Incluso habrá a gente que no le digan nada; no obstante, estoy convencida de que todos, en algún momento, os habéis dejado llevar por esas emociones que encontramos en una buena historia. Una historia tan apasionante que nos ha alejado totalmente de la realidad, y nos ha empujado a soñar y a imaginar un nuevo mundo donde nos hemos sumergido. Y también pienso que habéis sentido esa ilusión tan característica cuando os han regalado un libro en alguna ocasión. Tal vez hoy en día no esté tan de moda, pero el regalar un libro creo que es uno de los detalles más bonitos que se pueden tener; aunque cada vez se haga menos, pero creo que es una costumbre que no se debería perder.
Cuando somos pequeños, el leer se nos inculca como una obligación, sin explicarnos que puede ser un juego divertido en el que poder viajar desde nuestro cuarto. Recuerdo que, de muy jovencita, cuando iba con mis padres y mis hermanos a algún centro comercial, yo me perdía en la sección de los libros. Podía pasar allí horas sin darme cuenta, y es que había algo que me ataba a cada uno de los géneros. Y me imaginaba que, algún día, mis libros también estarían en esos estantes. Adoraba aquel olor, me enamoraban las cubiertas tan maravillosas, los colores, los títulos... Y las sinopsis de los libros que iba leyendo me invitaban a querer tener gran parte de ellos. Creo que es algo maravilloso adentrarte en este mundo, rodeado de este aroma indescriptible que, sin saber por qué, a nadie deja indiferente. Y mirar desde el punto de vista del autor: ser consciente de que sus obras se encuentran entre tantas joyas literarias, lecturas del momento, incluso premios importantes, creo que debe ser una sensación incomparable.
Es cierto que siempre me ha gustado estar rodeada de libros y poder sacar tiempo para leer y disfrutarlos; pero, sin poder evitarlo, la gran mayoría de las veces tiendo a imaginarme ese otro punto de vista, que ya os he comentado: el de la persona que escribe esas historias y consigue hacer soñar a los demás. Aunque, como sabéis, a través de Amazon he podido sacar a la luz dos libros (Escritos de una adolescente y Relatos cortos - Desengaños y traiciones), lo que de verdad me gustaría es publicar novelas. De alguna manera, quizás eso signifique para mí el día del libro: un sueño por cumplir, y la ilusión de seguir disfrutando leyendo.
¿Y para vosotros? ¿Qué significa el Día del Libro?
¡Hasta el lunes que viene! Gracias por estar ahí.
¡Feliz semana!
¡El día del libro! ¡Es verdad! Casi lo tenía olvidado... No tengo un recuerdo muy claro de una celebración "especial" del día del libro. Lo que sí recuerdo MUY vagamente es que una vez que fui con mi madre y mi hermana a una firma de libros (creo que para la feria del libro) y Margarita Landi le firmó a mi madre "La Mágica Espiral del Amor". He buscado el libro y es del 93 así que esto debió de ser por 1994 o así. Recuerdo que tras la firma, el libro se había convertido en una especie de tesoro valiosísimo. Gracias por traer de nuevo este recuerdo a mi mente. Y sí, estoy convencido de que algún día estarás tú firmando ejemplares. Llegará, seguro que sí.
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